- Donoso fue enfático en señalar que la medida no fue tomada a la ligera
- Como mandatario de Chía esta generando una autoridad sobre el municipio
- En la avenida Pradilla según cifras de la secretaría de Movilidad del municipio, cruzaron 44.555 vehículos de más de 3.4 toneladas
Luego de la decisión de restringir el paso de vehículos de carga de más de 3.4 toneladas por la avenida Pradilla a partir del 19 de septiembre, el alcalde de Chía, Leonardo Donoso, fue enfático en señalar que la medida no fue tomada a la ligera, y por el contrario advirtió que espera que la ANI genere un compromiso formal con Chía.
Pese a que a menos de 10 días de ponerse en marcha la medida que prohibirá al 70 por ciento de la carga pesada del país recorrer 800 metros de la avenida Pradilla hasta Centro Chía para hacer conexión con el norte de los departamentos de Boyacá y los santanderes, el alcalde Leonardo Donoso señaló que esta semana habló con la ANI quienes le manifestaron que hacia el mes de diciembre parecía se adjudicaba la licitación, que es una APP de iniciativa privada.

“Yo necesito que la ANI genere un compromiso formal con Chía”, enfatizó el mandatario, quien agregó que la Avenida Pradilla se construyó hace 40 años pensando en que sería la avenida principal de Chía, pero en ningún momento se pensó en que se convertiría en la conexión vial del occidente de Cundinamarca con otros departamentos.
Así mismo señaló Donoso que el flujo del corredor obligatoriamente ha crecido y a eso se suma que la única conexión entre la concesión vial de la Gobernación de Cundinamarca (Devisab) que viene desde Girardot-Anapoima y llega hasta Chía, en el semáforo de la variante; y la de Devinorte, que comienza en el peaje de la Autopista y va hasta la hacienda de los presidentes en Hato Grande, es la avenida Pradilla.
Y es que basta mirar que un recorrido desde Siberia hasta Chía, que debería hacerse en 15 minutos, hoy puede tardar casi hora y media, y el cuello de botella se forma en la Pradilla.
El alcalde Donoso señaló que se ha tratado de buscar soluciones. “Desafortunadamente la oficina de planeación en su momento no hizo las afectaciones viales necesarias para la época en la que se desarrolló Jumbo, McDonald, Plaza Mayor y hoy Chía colapsó”, dijo el mandatario.
“Yo no estoy obligando a los transportadores a tomar determinadas vías alternas. Como mandatario de Chía estoy generando una autoridad sobre el municipio. La voluntad política del Gobierno está, pero nosotros en Chía no podemos esperar más porque realmente la movilidad está impactando en la calidad de vida de los habitantes. Esta fue una medida muy concertada y muy estudiada”, enfatizó el mandatario.
“Desde que salí electo como alcalde empecé a hacer contactos con la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y ya completamos ocho meses y no ha pasado nada. Nosotros hemos adelantado varios procesos, tanto así que dentro de nuestro Plan de Ordenamiento Territorial quedaron plasmadas las vías alternas que se deben construir para solucionar los problemas de movilidad del municipio de Chía”, señaló Donoso.
Por eso para descongestionar la Avenida Pradilla, la administración de Chía propone dos variantes que se deben hacer a través de la APP: una, denominada la Troncal del Peaje, que arrancaría en el restaurante El Humero, saldría a la altura de Aguapanelas Internacional, serían 3.2 km, y para ello el municipio ya tiene algunos predios.
La otra, sería la Trocal del Río, entre Cota y Chía, que iniciaría en la Hacienda El Noviciado, cruzando por el club Guaymaral, la cual empataría con la Troncal del Peaje. “Se unirían las dos grandes vías, que deben ser de cuatro carrilles, con puentes, sin tocar el casco urbano del municipio”, enfatizó el mandatario, quien agregó que hasta ahora no hay nada concreto.
“Si hay un compromiso formal de la ANI con Chía pensaría la decisión porque ya tengo qué decirles a los habitantes. Si ya esperamos 20 años, esperemos 4 meses a que se adjudique. Pero yo modifiqué mi Plan de Ordenamiento Territorial, generé todo el desarrollo vial, no modifiqué el uso del suelo para no encarecer la tierra, quedó rural, pero no veo que fluya y la ANI lo único que me dice es: “tranquilo alcalde”, explicó Donoso.
“No puedo seguir esperando. La gente en Chía está desesperada por la movilidad”, finalizó el mandatario.
Cabe anotar que por la avenida Pradilla durante el mes de agosto, según cifras de la secretaría de Movilidad del municipio, cruzaron 44.555 vehículos de más de 3.4 toneladas, mientras que los decibeles de ruido, según un estudio de calidad del aire y la contaminación auditiva en el mismo corredor vial, sobrepasaron los 70, cuando lo permitido por ley es de 55 a 60 decibeles.