Más de 70 personas se encuentran contagiadas de la enfermedad en Caparrapi, expresó el alcalde Gonzalo Ramírez Gaitán. Ante la situación el mandatario ya puso en conocimiento de la secretaría de salud del departamento de Cundinamarca la situación de emergencia sanitaria que se presenta en su municipio, que se han hecho algunas fumigaciones muy superficiales y que se hace necesario que estas sean más contundentes para que se logre llegar hasta lo profundo del anidamiento del mosquito que se reproduce rápidamente.
Las personas afectadas manifiestan que el tratamiento para controlar el brote de leishmaniasis está llegando demasiado tarde a las personas infectadas, el alcalde también confirmó esta queja. Por último el burgomaestre señaló que el brote se está presentando también en algunos sectores del perímetro urbano.

La situación preocupa en las zonas rurales y urbanas de Caparrapí, Puerto Salgar, Guaduas y La Palma entre otros por la propagación del contagio de leishmaniasis.
Son varios los reportes que se han recibido en las últimas horas sobre la dramática situación que viven familias enteras cuyos integrantes han sido picados por el mosquito portador de la enfermedad.
¿Qué es la leishmaniasis?
Las leishmaniasis son enfermedades de transmisión vectorial con gran diversidad de parásitos, reservorios y vectores involucrados en la transmisión. Son causadas por diferentes especies de protozoos del género Leishmania y se transmiten a los animales y humanos a través de la picadura de insectos de la familia Psychodidae. Su presencia está directamente vinculada a la pobreza, pero otros factores sociales, además de los ambientales y climáticos, influyen directamente en su epidemiología, según manifiesta Organización Panamericana de la Salud.
La enfermedad ocurre presentando distintas manifestaciones clínicas, clasificadas en tres formas: cutánea, mucosa y visceral. La leishmaniasis visceral se caracteriza por episodios irregulares de fiebre, pérdida de peso, hepatoesplenomegalia, anemia y si no son tratados puede causar la muerte en más del 90% de los casos. La leishmaniasis mucosa puede conducir a la destrucción parcial o completa de las membranas mucosas de la nariz y la boca que pueden causar discapacidad grave, mientras que la leishmaniasis cutánea es la forma más frecuente de esta infección, y produce en su mayoría lesiones ulcerosas que dejan cicatrices por toda la vida.